28 ene 2010

Vanessa- sin terminar_ Natacha no aparece despues

EL ACEITE USADO

Habíase una vez una niña que se llamaba Natacha y un niño llamado Sergio. Estaban en el colegio y Sergio estaba dando el aceite usado y el maestro preguntó.
- Que levante la mano quién tira el aceite usado por el fregadero.
Levantaron la mano casi todos pero. Entre unas de esas manos estaba levantada la de Sergio.
Y el maestro dijo:
- Pues eso no se pude hacer, porque se contamina el rió y eso no puede ser - y lo dijo casi murmurando.
Y Sergio dijo:
pero..... maestro mi madre le va a dar igual, y lo va a tirar por el fregadero.
Sergio llegó a casa con una carta y lo dio a su madre, y dice la madre.
- Pero ¿ esto que es? - lo dijo con una voz chillona.
Y dijo Sergio con una voz suave :
- Mamá no es ningún parte.
¿ Pero entonces que es ?
Contestó la madre con una voz mas suave.
- No se lo que es pero me ha dicho que lo tienes que leer - contestó el niño.
Habló la madre y dijo:
- Pero..... ¿ qué es esto ? - murmuró la madre muy enfadada.
¿ pero que se cree tu maestro, eh...?
No se de verdad - con un miedo terrible.

19 ene 2010


Ficha bibliográfica
Título: "¡Socorro!"(12 cuentos para caerse de miedo).
Autor/a: Elsa Bonermann.
Ilustrador/a: Beatriz R. de los Ríos.
Editorial:
Alfaguara juvenil.

Ciudad: Buenos Aire(Argentina)

Año: 1988.

Nº pág: 169.

ISBN: 978-84-204-4869-5

Resumen: Una malvada abuela que odia a sus nietos;
unas misteriosas manos que te agarran; una gigantesca tela de araña;
niños que desaparecen; un cuadro que cobra vida para denunciar un crimen...
Doce sobrecogedoras historias de miedo que ponen los pelos de punta.
¡Cuidado, no las leas antes de irte a la cama! No podrás dormir...

Género: Historias de miedo.

Tema: Relatos de miedo: Terror.

Este libro se trata de: Historias de miedo.

Mi opinión: A mi me gusta mucho el libro porque es muy interesante y te deja
siempre con la intriga. No paraba de leerlo. A mi este libro me lo recomendó
mi prima que ella también lo leyó. Os aconsejo a los que seáis miedosos
que no lo leáis antes de irse a dormir, tendréis pesadillas.

Nerea Ramos




18 ene 2010


EL CONSEJO DE LA INFANCIA DE ALCALÁ DE GUADAÍRA

En la mayoría de los colegios de Alcalá se han elegido un representante y dos o más vocales.
Nosotros representantes y vocales debemos acudir a unas reuniones en las que hablaremos de propuestas de cosas que los niños quieren para Alcalá.
En nuestro colegio fuimos elegidos como representante Miguel Romero de 6º y como vocales Nerea Ramos de 6º y Irene de 5º.
No solo tenemos reuniones, en este Consejo de Infancia tenemos excursiones y plenos también.
En el Consejo de Infancia las primeras reuniones estábamos todos juntos e íbamos todas las semanas, pero varias reuniones más tarde se separaron vocales de representantes y no vamos todas las semanas, vamos si a caso una vez al mes.


Miguel Romero

LOS DELEGADOS


Los delegados de mi colegio hacemos reuniones cada cierto tiempo.
En las reuniones nos juntamos todos los delegados/as y algunos subdelegados/as para hablar de las propueestas para las fistas (como el día de la paz, el día de Andalucía, etc...) Allí las clases que en su hora de tutoría han elaborado propuestas y otras cosas se las dicen a Marisa, la jefa de estudio que es la que está en las reuniones con nosotros.
En la última reunión los/las delegados/as dijeron sus propuestas a Marisa y dijimos que clases queríamos la hucha solidaria para recaudar un poco más de dinero para el "proyecto Honduras".

Miguel Romero (Delegado de 6º B)

14 ene 2010

UN DÍA EN EL PARQUE

Había una vez una niña que se llamaba Sandra, a la cual le gustaba reciclar y ayudar al medio ambiente, aconsejando a la gente sobre la contaminación.
Un día Sandra se encontró a un niño que estaba destrozando las plantas del parque y le dijo:
-Oye, tú, ¿no sabes que eso está prohibido?-le explicó.
-¿Él qué?-contestó él con tono pasota
-¡Que va a ser!¿crees que eso de ir destrozando plantas por ahí está bien?-le dijo un poco mosqueada.
-Bueno...es que me aburro y solo se me ocurre arrancarles los pétalos a las flores y esas cosas.
-Mira, no lo vuelvas a hacer. ¿Te gustaría que a tí te arrancarán un ojo? ¿A que no?-le hizo comprender ella.
-Nooo...ya no lo volveré a hacer, te lo prometo-contestó el niño.
-Por cierto, ¿cómo te llamas?-le dijo con curiosidad.
-¿Yo?
-Sí, tú.
-Yo, Manuel y ¿tú?-quiso saber
-Yo, Sandra .
-¿Quieres venir conmigo? Quiero que aconsejes a mis amigos ya que ellos también lo hacen-le invitó él.
-!Venga , vale¡-contestó con gran entusiasmo.
Los dos fueron a una plaza donde estaban los amigos de Manuel, que por cierto estaban jugando a darle patadas al tronco de un árbol.
Sandra se presentó:
-Hola, me llamo Sandra y vengo para deciros que no podéis ir destruyendo la naturaleza-habló con tono convincente.
-¿Por que?-se escuchó una voz por allí
-¡Porque no! ¿A que os gusta ir al campo y ver que hay árboles que dan sombra y todo eso?¿A que sí?.

-Síííí-se escuchó una voz unánime.
-Bueno, si es así, no debéis destrozarla naturaleza.
-Y ahora a jugar- dijo Manuel muy contento.
Desde entonces toda la pandilla, (Sandra incluida) juegan todos los días en el parque y corrigen a la gente que estropea las plantas.

AUTORA: Lourdes Risoto

MARGUI Y DIABLO

Érase una vez una perrita muy ecologista, que ayudaba y cuidaba el medio ambiente. Se llamaba Margui, tenía los ojos marrones, su pelaje era de color blanco con manchas marrones y negras.
Pero ella tenía un gran enimigo, un rottweiler llamado Diablo con muy malas intenciones puesto a
que no le gustaba nada el medio ambiente. Tenía los ojos negros y en su pelaje se podía ver que algunas partes eran marrones y otras negras.
Un día Margui salió al parque para cuidar y plantar algunas margaritas ( que porcierto eran sus preferidas) y vio que algunas estaban arrancadas de raíz. Diablo, que la estaba vigilando, se acercó a ella y le dijo:

- Oye pequeña ¿por qué estas plantando lo que yo acabo de quitar?

-Y... ¿por qué tú has arrancado esas preciosas margaritas?-preguntó ella a su vez.

- Y... ¿por qué te gusta tanto el medio ambiente?-volvió a preguntar Diablo.
Y así siguieron hasta que Margui respondió:

-No se por qué destrozas estas plantas, y aquellos árboles. El medio ambiente lo tienes que cuidar puesto que sin él no existiriamos ningun perro de este barrio- explicó Margui a Diablo.

-¡Pero mira que eres testaruda!¿No te das cuenta de que no me gusta el medio ambiente?Lo que a mí me gusta es ir en coche y contaminar, arrancar las flores, destrozar los árboles, etc, etc...-siguió Diablo.

Pero Diablo se fue a su casa con la conciencia intranquila y esa noche soñó con muchas cosas con las que nunca había soñado antes...

Al día siguiente Margui se encontró con Diablo, que estaba plantando y regando las margaritas, y Margui muy impresionada se acercó a él y le dijo:

-¡Pero que ven mis ojos, Diablo está plantando en vez de destrozando!

- Margui, me he dado cuenta, he reflexionado y he visto que tienes razón. A partir de ahora plantaré todos los días contigo y reñiré y asustaré a todos los que intenten arrancar o estropear alguna planta-dijo Diablo muy convencido.

AUTORA: Laura Garrido

EL CONVENCIMIENTO DE DIABLO (sin terminar)

EL CONVENCIMIENTO DE DIABLO

Pasó una vez que una perrita muy buena con el medio ambiente llamada Margui, se encontró con un perro malo llamado Diablo
.
Margui era una perra blanca con manchas negras y marrones. A Margui le gustaba ir al parque y al campo a cuidar las flores, los arboles... Margui nunca tiraba basura al suelo porque ella era ecologista.
Un día se fue al parque a regar la plantas y vio a un perro grande del que había oído hablar.
Ese perro se llamaba Diablo (era un Doberman). Estaba volcando las papeleras y que así cayera la basura al suelo.
-¡Oye! ¡No tires más basura al suelo!-dijo Margui enfadándose.
-¡¿Quién me lo dices, tú?! ¡Ja, ja, ja, ja! -dijo Diablo entre carcajadas.
-¡Sí, te lo digo yo!-dijo Margui.
-¡Qué me estás chuleando, quieres pelea, eh!-dijo Diablo enfadado.
-¡No, te equivocas, no quiero pelea, quiero estar bien contigo y que no tires más cosas al suelo!-dijo Margui tranquilizando a Diablo.
-¡Pero si no hago gamberradas, me aburro! No hay nada que hacer.
-Sí que hay cosas que hacer, como regar las plantas y eso -dijo Margui.
-Bueno... lo intentaré... -dijo Diablo.
-¡Así me gusta!-dijo Margui muy contenta.
Y pasó mucho tiempo y Diablo fue bueno toda su vida.

AUTOR: Miguel